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Durante las últimas décadas las calderas de condensación han conquistado al mercado. Su instalación se ha generalizado en muchos países y ya no se eligen otro tipo de calderas. Entre sus ventajas destaca la eficiencia que ofrecen que se traduce en ahorro de dinero y de combustible.
En este artículo vamos a ver por qué las mejores calderas de condensación valen la pena y todas las ventajas que ofrecen contra los otros tipos de calderas.
Las calderas de condensación utilizan como combustible gas natural o derivados del petróleo. Fueron diseñadas para mejorar la eficiencia energética en los hogares.
Su sistema convierte la condensación del vapor de agua en calor, por lo que pueden reutilizar el calor que se pierde y disipa. La diferencia principal que tienen con los otros sistemas es su eficiencia que puede alcanzar el 99 % frente al 75 % que poseen los demás métodos.
Las calderas de este tipo utilizan distintos elementos como combustible. Cuando son encendidas, las calderas transfieren el calor del quemador hacia un intercambiador de calor. El aire caliente viaja por medio del intercambiador y se mantiene en él todo el tiempo que sea necesario para aumentar la temperatura. Este calor, luego, se lleva hacia los radiadores.
El calor viaja, también, hacia un área secundaria de condensación, un elemento que no tienen las calderas tradicionales. En este área, el aire caliente se condensa dando como resultado vapor de agua. En esta sección está presente la ventaja principal que hace que el precio caldera condensación sea competitivo en el mercado, ya que aumenta su eficiencia.
Las calderas de condensación recuperan la mayor parte del calor antes de que se pierda. Por lo que son herramientas perfectas para reciclar el calor y aumentar la eficiencia en general.
Como se sabe, la ventaja principal de elegir instalar calderas de condensación es su eficiencia. Una mayor eficiencia es el equivalente a un ahorro de energía y de dinero.
Las calderas de condensación son, efectivamente, más eficientes que aquellas que no incluyen estos sistemas. Una eficiencia superior del 60 % quiere decir que, por cada euro, aproximadamente, tan solo pierdes 8 céntimos frente a los 40 que perderías con las tradicionales.
La caldera que utilices tendrá un impacto directo sobre el medioambiente y el planeta. Como las de condensación utilizan menos energía y emiten menos carbono a la atmósfera, son una opción sostenible que respeta la naturaleza.
Las calderas de condensación son sistemas sellados. Esto significa que cogen aire del exterior y liberan los desperdicios en forma de gas al exterior por medio de un sistema de tuberías. Asimismo, están equipados con sistemas de seguridad como válvulas de presión y termostatos.
Las calderas tradicionales son sistemas que toman oxígeno del ambiente en el que se encuentran y no cuentan con los mismos dispositivos de seguridad.
Los modelos más recientes de calderas son sistemas compactos que aprovechan el espacio. Si reemplazas tu antiguo sistema notarás la diferencia de tamaño que presentan los distintos modelos.
Sin embargo, las calderas de condensación no son sistemas perfectos. Presentan ciertas desventajas que, de todas maneras, las posiciona positivamente frente a las demás alternativas del mercado.
En casos de temperaturas extremadamente bajas, el sistema puede apagarse por la tubería externa que presentan. Esto los hace susceptible frente a las heladas y el congelamiento. Las calderas de condensación, también, pueden llegar a corroerse por el ácido condensado.
Sin embargo, se recomienda cambiar las calderas tradicionales por calderas de condensación una vez que los niveles de eficiencia disminuyen y comienzan a ser un inconveniente desde el punto de vista económico.
Como los sistemas de las calderas de condensación son más complejos, son más caras de mantener. Las calderas tradicionales son fáciles de reparar y pueden ofrecer un ahorro de dinero a corto plazo. Sin embargo, pese a este gasto adicional que presentan, las calderas de condensación son la mejor opción a largo plazo.
Para poder elegir las mejores calderas de condensación es importante considerar sus características claves. Entre estas se pueden encontrar modelos simples o mixtos, siendo las mixtas las más utilizadas para uso doméstico. Después se encuentra la potencia que varía dependiendo si es para uso en hogares particulares o comunitario.
Por otro lado, encontramos la modulación y el caudal. La modulación es un aspecto clave, ya que permite aumentar la eficiencia general de la caldera y, así, ahorrar más energía. El caudal indica la cantidad de agua que puede suministrar en un tiempo determinado.
Estas calderas suelen ser más costosas. Sin embargo, existe un plan en nuestro país que disminuye, de manera significativa, los precios caldera condensación, convirtiéndolas en opciones más accesibles.
El plan renove caldera es un sistema de sustitución que puede ser encontrado en la gran mayoría de las comunidades autónomas. Básicamente, es un plan de reemplazo de calderas tradicionales por modelos más eficientes de condensación mediante el ofrecimiento de incentivos económicos.
Cada comunidad se encarga de ofrecer el plan para que los usuarios reduzcan su consumo energético y utilicen sistemas más seguros basados en gas natural. Las subvenciones están enfocadas a todos los usuarios que buscan reemplazar sus antiguos sistemas.
Los requisitos suelen estar determinados por cada comunidad autónoma en particular. Sin embargo, entre ellos se suelen encontrarse los siguientes:
Para solicitar acceso al plan tendrás que contar con el DNI del titular de la instalación de gas, una cuenta bancaria para recibir el ingreso y otros detalles que te serán provistos por las empresas instaladoras adheridas a este sistema.
Somos una empresa con más de 20 años de experiencia profesional en la instalación y mantenimiento de gas natural y luz, de aire acondicionado, así como servicio técnico de electrodomésticos en Madrid.
